Las nuevas flores de la desobediencia


Siempre habrá monjas malcaradas que lean torcido el Evangelio. Y niños que seguirán naciendo con un erizo en la cabeza. Y mujeres con un solo ojo lleno de ojos y dentro más ojos. Nuevas formas de rebeldía como vencejos a ras del suelo se reirán de las águilas imperiales. Nuevas flores de desobediencia hasta ahora ni siquiera soñadas se cultivarán en los arrabales donde viven los nadies. Formas de vida hasta ahora imposibles saldrán por fin de la botella. Pasará algo. Saldremos de los ataúdes donde vivimos. Vendrán noches tan espléndidas que se necesitará un nuevo idioma para comprenderlas. Amores tan intensos que faltarán poetas para cantarlos. Ideas tan asombrosas que bastará pronunciarlas para que este mundo se vuelva más libre y más alegre y más hermoso.